Yo no soy yo

Yo no soy quien creo ser. Ni quien tú crees que soy. Yo no soy yo. No tengo una personalidad única y definitiva. Soy permeable. Soy el crisol en el que se funden las huellas de todo cuanto he vivido y de todo cuanto ha vivido a través de mí. Soy la suma de todas mis edades. Soy la inocencia y la lujuria, el duelo y el contento, el esplendor y el vacío. Soy todas las tormentas que he atravesado y todos los amaneceres que he conquistado. Soy todos aquellos con quienes he compartido una parte del camino. En la salud y en la enfermedad. En la riqueza y en la pobreza. Soy la mordedura de un recuerdo. Soy la página que otros ya han pasado. Soy el hueco que deja un vacío. Soy lágrima. Soy los brazos que me habéis tendido cuando las fuerzas me han abandonado. Soy todos los horizontes que me han alentado. Soy esa persona que detuvo su mirada en la tuya y te tomó como ejemplo. Soy tu triunfo cuando dices que lo has conseguido. Soy esperanza. Soy mi madre cuando me abraza y me devuelve a la infancia. Soy la vida que se le escapa a mi padre. Soy rabia. Soy todo lo que pasará cuando los demás se hayan ido. Soy todo lo que pasará cuando yo me haya ido. No, yo no soy yo. Yo soy todos vosotros.